Bellingham marcó un gol que el árbitro anuló por finalizar el tiempo, y se dirigió a él en actitud agresiva y gritando “it’s a fucking goal”.
MADRID – Jude Bellingham ha sido sancionado con dos partidos de suspensión por el Comité de Disciplina de la RFEF, por su expulsión con roja directa en el último minuto del partido contra el Valencia.
Bellingham marcó un gol que el árbitro anuló por finalizar el tiempo, y se dirigió a él en actitud agresiva y gritando “it’s a fucking goal” (es un jodido gol), según el acta arbitral. El Real Madrid alegó que el jugador no fue agresivo ni ofensivo, y que solo dijo una vez la expresión, que es común en el lenguaje coloquial.
Le gritó al central
El Comité rechazó las alegaciones del club, al considerar que las imágenes no demuestran el error material manifiesto que se alega, y que la actitud y el tono del jugador fueron de menosprecio o desconsideración hacia el árbitro, lo que supone una infracción del artículo 144 del Código Disciplinario de la RFEF.
La sanción implica una multa de 700 euros al club y 600 al jugador, y le impedirá jugar los dos próximos partidos de Liga, ante el Celta y el Osasuna. El Real Madrid puede recurrir la decisión ante el Comité de Apelación.
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Esta es la primera expulsión de Bellingham en su carrera profesional, y supone un duro golpe para el Real Madrid, que pierde a uno de sus jugadores más destacados de la temporada.