En una final de Copa marcada por el desorden, el Feyenoord de Róterdam se alzó con la victoria gracias a un solitario gol de Paixao.
RÓTERDAM.- La final de la Copa de Holanda, celebrada en el estadio De Kuip, fue interrumpido en dos ocasiones debido a altercados y bengalas en las gradas, una de las cuales causó un incendio que detuvo el juego por 15 minutos.
El NEC de Nimega, pese a no ser favorito, presentó un desafío formidable, mostrando un juego valiente y creando múltiples oportunidades, incluido un gol anulado. Sin embargo, los problemas comenzaron desde la primera mitad con el lanzamiento de bengalas, una situación recurrente que ha afectado a varios partidos de la Eredivisie.
Tras la reanudación, el Feyenoord tomó el control del partido hasta que una nueva serie de bengalas obligó a una pausa. Contra todo pronóstico, el juego continuó, y Paixao, asistido por el mexicano Santiago Giménez, marcó el único gol del partido. A pesar de la expulsión de Minteh, que dejó al Feyenoord con diez jugadores, el NEC no logró capitalizar su ventaja numérica.
El Feyenoord conquistó su 14ª Copa, acercándose al récord del Ajax (20), mientras que el NEC sufrió su cuarta derrota en una final. Santiago Giménez, contribuyendo significativamente al triunfo, fue sustituido tras 75 minutos por Ayase Ueda.