A pesar de que Emerson fue presentado en el Camp Nou a inicios de agosto, el 31 del mismo mes fue vendido sin previo aviso al Tottenham de Inglaterra.
BARCELONA.- El cierre de transferencias en el FC Barcelona fue vertiginoso, pues un equipo que actualmente se encarga de cuadrar los números en los libros de cuentas no se tentó el corazón en dejar ir jugadores para aligerar los gastos, y una de esas víctimas fue Emerson Royal.
En una entrevista para Marca apenas unas horas después de su segundo traspaso en el verano, el lateral brasileño de 22 años explicó que su transferencia a Tottenham se dio sin que él tuviera idea de que se estaba negociando su carta, pues el haber llegado a Barcelona apenas un mes antes, no le hacía sospechar que pudieran acabar con su sueño tan pronto.
Emerson explicó que “las formas del Barsa” le dolieron y que “pudieron ser diferentes”, pues él estaba dispuesto a hacer lo que fuera por mantenerse en el club, ya que como mencionó antes, su sueño siempre había sido jugar en el FC Barcelona, lo que solo pudo hacer por 90 minutos repartidos en tres encuentros.
Jugué el domingo de titular, al día siguiente me desperté y me fui a entrenar tranquilo. Ahí ya empecé a ver que salían un montón de cosas; que el Tottenham hablaba con el Barcelona, que lo tenían casi hecho... Yo no entendía nada de lo que estaba pasando porque no sabía nada", relató sobre los pasos de su salida.
Y añadió: "Por la tarde me llamaron del club para que fuera a la ciudad deportiva porque querían hablar conmigo y ahí ya me enteré de que me querían vender".
Reveló que las palabras de los dirigentes no eran preguntando si quería irse a Inglaterra, sino que le estaban avisando que apenas 29 días después de su presentación como refuerzo Culé, ahora partiría al Tottenham.
"Me empezaron a contar que la situación del club no era buena, que atravesaba un momento complicado y que para ellos era mejor vender. Yo les repetía que mi intención era quedarme porque tenía la ilusión de jugar aquí", admite.
Pero llegó un momento en el que se dio cuenta de que le "estaban diciendo" que se fuera "sí o sí". "Me estaban echando con muy buenas palabras", sentenció Emerson.