El defensa mexicano estuvo presente los 90 minutos en el juego, pero su equipo no pudo sacar los tres puntos
VIGO, España.- Un nuevo error defensivo y la falta de pegada en ataque ante la ausencia del internacional español Iago Aspas volvieron a limitar al Celta, que empató en Balaídos ante la SD Eibar por marcador de 1-1.
El conjunto gallego que dirige el argentino Eduardo Coudet sigue sin ganar en el 2021.
El Celta, que pudo contar en la defensa con el colombiano Jeison Murillo y volvió a alinear al uruguayo Lucas Olaza -próximo a su regreso a Boca si no llega a buen puerto la negociación- se encontró una carambola al poco de comenzar el partido: un taconazo de Santi Mina rebotó en Sergio Álvarez y la pelota rechazada colocó a Brais Méndez solo ante Dmitrovic. Ese fatalismo del Eibar le costó un gol, un tempranero tanto dentro de un primera parte con pocas ocasiones.
El Eibar lo intentó con un disparo lejano de Bigas; respondió el Celta con un centro de Nolito que envió el uruguayo Lucas Olaza al poste; minutos después, en un córner mal defendido por el conjunto celeste, llegó un mal remate de Kike García; cerca del descanso, probó Kike García con un tiro desviado.
Una pérdida de pelota de Okay facilitó el gol del empate del Eibar, que aprovechó el error defensivo celeste para contestar con una veloz combinación Muto-Bryan Gil.
El empate calmó al Eibar y estiró al Celta. El equipo de Eduardo Coudet adelantó sus líneas. Se apoderó de la pelota, creó peligro. El primer aviso fue un tiro desviado de Brais Méndez; luego, un centro de Olaza finalizó con un potente cabezazo a bocajarro de Hugo Mallo que despejó Dmitrovic; el portero volvió a ser determinante minutos más tarde para tapar un tiro de Brais Méndez.
El Celta no aflojó, pese a que, sin la genialidad de Iago Aspas, carece de pegada en ataque. Consiguió encerrar al Eibar, que resistió sin apenas apuros, salvo en la última acción del partido, una lejana falta colgada sobre el área vasca que, tras un cabezazo de Okay, dejó solo a Brais cerca del área pequeña para cerrar el partido con un disparo flojo.