Según el periodista Carlos Jiménez, Cabañas se salvó de morir porque el arma que usó ‘El JJ’, era de un calibre pequeño.
El 25 de enero de 2010, Salvador Cabañas, entonces jugador del América, sufrió un atentado que marcó su vida y su carrera. El delantero paraguayo fue baleado en la cabeza por un narcotraficante en un centro nocturno de la Ciudad de México.
Según el periodista Carlos Jiménez, conocido como C4 Jiménez, Cabañas se salvó de morir porque el arma que usó su agresor, José Jorge Balderas Garza, alias ‘El JJ’, era de un calibre pequeño. La bala se alojó en el cerebro del futbolista, causándole graves daños.
El motivo del ataque fue una discusión entre Cabañas y ‘El JJ’ por el rendimiento del jugador en el campo. José Jorge Balderas', miembro del cártel de los Beltrán Leyva, le reclamó al paraguayo por la falta de goles, especialmente después de que las Águilas perdieran 2-0 ante Morelia horas antes.
El altercado ocurrió en el baño del centro nocturno ‘El Bar Bar’, donde Cabañas se enfrentó a ‘El JJ’ y le retó diciéndole “Jálele, a ver si es cierto”. El criminal no se lo pensó dos veces y le apuntó a la cabeza, dejándolo gravemente herido.
Cabañas fue trasladado de urgencia a un hospital, donde se le practicó una cirugía pero no se le pudo retirar la bala para evitar causar más daños. Los médicos no pudieron recuperar todas las funciones cerebrales del jugador, quien tuvo que abandonar el fútbol profesional.
A más de una década del suceso, Cabañas sigue luchando por recuperar su salud y su pasión por el deporte. Actualmente, se dedica a entrenar a niños y jóvenes en su natal Paraguay, donde es considerado un héroe y un ejemplo de superación.