Resulta que Metcalf, durante la temporada baja, había aprendido expresamente este lenguaje para desafiar a su oponente sin infringir las reglas de la NFL.
En un emocionante enfrentamiento de la Semana 11 de la NFL, el pasado domingo 19 de noviembre, los Rams de Los Angeles se impusieron con un ajustado marcador de 17-16 a los Seahawks de Seattle en el SoFi Stadium de California. El partido estuvo marcado por una jugada crucial: a cinco minutos y 27 segundos del primer cuarto, Geno Smith conectó un pase impecable con DK Metcalf en la yarda 8, asegurando el touchdown que puso a los Seahawks en ventaja.
Sin embargo, lo que se destacó más que la jugada en sí fue la celebración de Metcalf, quien utilizó lenguaje de señas para enviar un mensaje desafiante a Ahkello Witherspoon, manifestando que "El número 44 es mi hijo". Resulta que Metcalf, durante la temporada baja, había aprendido expresamente este lenguaje para desafiar a su oponente sin infringir las reglas de la NFL.
El gesto de Metcalf abre un debate sobre las reglas de la liga, que desde hace un tiempo prohíben las burlas entre jugadores durante los partidos. La repetición de estas infracciones puede llevar a la expulsión del jugador y a posibles multas o suspensiones. Aunque en este caso eludió la sanción al no ser una provocación verbal, queda por ver si la NFL tomará medidas al respecto.
Por otro lado, los Seahawks se preparan para su próximo enfrentamiento este jueves 23 de noviembre, en el Día de Acción de Gracias de Estados Unidos, contra los 49ers de San Francisco en el Lumen Field a las 19:20 horas (tiempo de la CDMX). Este encuentro promete ser tenso, especialmente tras la recuperación de los 49ers, y podría mantener la emoción en lo más alto de la temporada.