El LAFC, un club de expansión que compite en su sexto año, podría convertirse en el primer bicampeón de la MLS desde el LA Galaxy (2011-12).
LOS ANGELES.- El campeón defensor Los Angeles FC se clasificó a su segunda final consecutiva de la MLS al derrotar 2-0 al Houston Dynamo la noche del sábado, con goles de Ryan Hollingshead y un autogol de Franco Escobar. El equipo angelino viajará a Columbus el próximo fin de semana para disputar el título ante el Crew, que venció 3-2 al FC Cincinnati en un partido emocionante.
El LAFC, un club de expansión que compite en su sexto año, podría convertirse en el primer bicampeón de la MLS desde el LA Galaxy (2011-12). El equipo dirigido por Bob Bradley no ha recibido gol desde octubre, gracias a las cinco atajadas de Maxime Crépeau y a la solvencia defensiva de Giorgio Chiellini y Diego Palacios, que frustraron al Dynamo, que vio cortada su racha de nueve partidos sin perder.
El partido tuvo un sabor especial para los mexicanos, ya que se enfrentaron Carlos Vela, el jugador franquicia del LAFC, y Héctor Herrera, el mediocampista del Dynamo. Vela estuvo cerca de anotar dos veces en los primeros minutos, pero se topó con el travesaño y el fuera de juego. Herrera intentó generar juego para su equipo, pero se vio superado por la presión del rival.
Vela fue ovacionado por la afición cuando salió de cambio en el segundo tiempo, en lo que podría ser su último partido en el BMO Stadium. El delantero termina contrato este invierno y no ha confirmado si seguirá en el club. Chiellini, el veterano italiano que llegó al LAFC desde la Juventus hace 18 meses, también podría haber jugado su último partido en casa, ya que se rumora que se retirará a los 39 años.
El LAFC abrió el marcador en el minuto 44, cuando Hollingshead aprovechó el rebote de un cabezazo de Chiellini que había sido detenido por Steve Clark. El Dynamo no pudo reaccionar y en el minuto 80, Escobar marcó en propia puerta al intentar despejar un centro de Palacios. El defensor, que jugó 19 partidos para el LAFC la temporada pasada, se lamentó mientras sus compañeros trataban de consolarlo.