Su contrato termina en junio de 2024, pero no se descarta que pueda renovar por un año más si sigue rindiendo al máximo.
A sus 38 años, Luka Modric sigue siendo uno de los pilares del Real Madrid y de la selección croata. El Balón de Oro 2018 no se pone fecha para el adiós y mantiene su nivel y su ambición intactos. Su futuro es incierto, pero su presente es brillante.
El centrocampista croata ha demostrado que la edad no es un obstáculo para seguir siendo importante en el equipo blanco, donde lleva desde el verano de 2012. Su contrato termina en junio de 2024, pero no se descarta que pueda renovar por un año más si sigue rindiendo al máximo.
Modric no solo brilla en el Real Madrid, sino también en la selección croata, donde es el líder indiscutible. Su seleccionador, Zlatko Dalic, ya lo dejó claro en el sorteo de la Eurocopa en Hamburgo: “Nadie ha dicho que la Eurocopa sea el final de Modric”. El mediocampista ha recuperado el ritmo tras un inicio de temporada irregular y ha vuelto a mostrar su calidad y su visión de juego.
Modric tiene sueños por cumplir, tanto con su club como con su país. Con el Real Madrid, quiere seguir ampliando su palmarés, que ya cuenta con cuatro Champions League, dos Ligas, cuatro Mundiales de Clubes y tres Supercopas de Europa, entre otros títulos. Con Croacia, quiere ganar un título, algo que estuvo a punto de lograr en la pasada Liga de las Naciones, donde cayó en la final ante España por penaltis. Además, quiere superar a Puskas como el futbolista más veterano en vestir la camiseta del Real Madrid. Le faltan nueve meses para conseguirlo.